Imagen de drobotdean a Freepik
Euphoria,
Forever, till the end of time
Julia miraba cómo se desvanecía el humo de su cappuccino macchiato mientras reflexionaba sobre el caso que tenía encima de la mesa, ya conocido como "Calendarios de adviento".
Iba mucho más allá de un caso puntual de actuación dudosa. El preparado personalizado se había distribuido a decenas de miles de personas. Y era, de hecho, el primer caso que afectaba a compañías que iban más allá del entorno tecnológico. TechMindFulNess, la empresa que había desarrollado "Presence" había llegado a acuerdos con HealthPharma, multinacional farmacéutica que se había especializado en fármacos personalizados, y FoodySimple, especialista en desarrollar componentes nutricionales específicos a partir de análisis genético.
Estos niveles de personalización de diagnóstico, antes sólo al alcance de multimillonarios o deportistas de élite, ahora podían generalizarse gracias a las tecnologías de inteligencia artificial. Y "presence" se convertía en el canal de venta óptimo, ya que podía "convencer" al humano de la conveniencia de drogarse.
Sin embargo, era cierto que ninguna de las sustancias utilizadas en las capsulas de los calendarios eran consideradas adictivas. Así lo demostraban las analíticas hechas.
Lo que generaba adición es el estado superior de salud y bienestar al que te llevaban los componentes que las empresas habían generado para ti. La combinación de la atención psicológica, nutricional y bioquímica.
¿Era condenable? ¿Era diferente del consumo del Wrapped de Spotify, que te hacía tu cóctel ideal de música? ¿O de los Insights de Microsoft que te recomendaban tomarte un descanso, o te ayudaban a preparar una reunión?
Nos encontramos en un momento en que las máquinas pueden ayudarnos a estar mejor, cada día. El riesgo es que algunos hombres lo utilicen de forma inadecuada, para satisfacer los deseos de siempre, poder, gloria, riqueza.
De momento, ningún humano había denunciado que había perdido el control de su vida, o que los combinados tuvieran efectos secundarios indeseados. Sólo algunas quejas si excepcionalmente se retrasaba la entrega de la dosis.
Ya que, como era de esperar, el calendario de adviento ahora había mutado a un servicio periódico, diario, permanente, con capsulas personalizadas para cada día, para cada persona.
Decidió limitar las ganancias de estas compañías y forzarlas a dedicar el excedente a la generación de capsulas personalizadas para las personas atendidas por los servicios públicos de salud.
Una filantropía forzada.