Confianza ciega – Cara B – (AI13)
El otro lado de la fuerza
Let go of the light
Fall into the dark side

Julia clasificó el expediente en la carpeta que había llamado DarkSide.

No tenía mucho que rastrear, más allá de la notificación de la propuesta que recibió la víctima, un controlador financiero de la empresa StarProtect, y las grabaciones de las cámaras de seguridad de alrededor.

La presunta unidad Hedonis que había trabajado cuatro horas diarias en la casa del controlador financiero no figuraba en ninguno de los registros obligatorios. Ningún rastro. 

Sólo unas imágenes borrosas tomadas desde mucha distancia, cuando se acercaba a la entrada de la casa, pero nada que permitiera saber de dónde venía la unidad, hacia dónde iba las horas que no estaba en esa casa…

¿De dónde provenían estas unidades? ¿Cómo se podían hacer con su control? ¿Cómo evitaban el rastreo que Human Behaviour imponía a la comunidad robótica?

Siempre había intereses para crear circuitos alternativos. 

Desde los fabricantes, que querían colocar las unidades que por determinados detalles no habían superado los exigentes controles de seguridad, pasando por los desarrolladores, que generaban tanto código como hardware que después no podían vender como nuevo por los circuitos habituales… 

Pero sobre todo las fuerzas ocultas del poder, que querían seguir regulando el mundo a su conveniencia, ahora utilizando también estas nuevas tecnologías.

Decidió escribir algunas recomendaciones. 

Por un lado, era necesario sensibilizar a los potenciales propietarios. De la misma forma que se había hecho campañas para que los incautos estuvieran más atentos a los ataques de phishing, era necesario ahora poner en conocimiento de la gente el riesgo que tenía dejar entrar una unidad no verificada dentro de casa. 

Ya existían mecanismos de validación de autenticidad, construidos sobre plataformas seguras con BlockChain, que permitían a los propietarios o anfitriones validar que sus unidades estaban certificadas. 

La víctima no lo hizo, ya que según dijo le habían dicho que al tratarse de una unidad experimental aún no estaba "dada de alta" en el sistema, y que por eso le salía más económica… 

Por otra parte, era necesario realizar un seguimiento exhaustivo del proceso de fabricación y de las mermas del mismo. 

Probablemente también controles en puntos clave del tráfico de estas unidades. Estos controles supondrían quejas de los partidos más partidarios de la libertad de los humanos, puesto que los controles de las unidades robóticas a menudo comportaban también como efecto secundario la monitorización de las personas. 

Un nuevo juego de equilibrios entre protección general y libertad individual.

Miró cuántos expedientes tenía clasificados como DarkSide. Éste era el caso doscientos treinta y siete.

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