Hay gobernantes que son respetados por todos los grupos políticos, y que más allá de su color, son opiniones que todos escuchan, y que cuando las dejamos de tener, las echamos de menos.
Es el caso del Conseller Antoni Castells, que hizo el pasado 14 de septiembre de 2009 un resumen de la situación económica y política del país, en una conferencia del Círculo Financiero en la sede de "la Caixa".
Indicaba Castells que si bien desde la vertiente catalana, el curso anterior estuvo marcado por la dura y larga negociación sobre la aplicación del Estatuto en el apartado de financiación autonómica, ahora toca dedicarse plenamente a ayudar al país a superar la crisis lo más pronto posible y con el mínimo desgaste.
La reflexión básica de Castillos es que la economía y la política no pueden ir desatadas, y que la robustez de los dos pilares es imprescindible para generar la riqueza y el crecimiento que el estado del bienestar requiere. El estado y el mercado tienen que ir juntos. Hay que encontrar el equilibrio entre Keynes i Schumpeter, como unas horas más tarde, a menos de 500 metros, nos recordaría Alfons Cornella en su "update" de Infonomia en el auditorio de la Illa.
El Conseller es de la opinión que, aunque lo peor parece haber pasado ya, no se puede dar ninguna oportunidad a una posible recaída y que por lo tanto es razonable mantener la vigilancia desde el optimismo. Comentaba que cree que se aprendió la lección de la depresión de la década de los 30 y que nos evitará entrar en depresión y salir pronto de la recesión. Los errores del pasado fueron una falta de decisión de los estados para crear estímulos y actuar de manera decidida, aunque eso generara endeudamiento, y también una retirada prematura de las medidas anti-crisis. Este convencimiento de que todavía no es el momento de rebajar la vigilancia es lo que lo lleva a manifestarse en contra de un aumento de los impuestos, a pesar de la posición de su partido, aunque es consciente de que no se puede mantener un déficit del 10% durante demasiado tiempo.
Así y todo los brotes verdes se materializan en algunos paises que ya empiezan a tener crecimientos trimestrales positivos en Europa. Indirectamente, Castells cree que la mayor conexión de Cataluña con Europa, superior a la de otras autonomías, puede favorecernos para llegar de nuevo al crecimiento antes. El Estatuto en despliegue, el crecimiento de PIB por capita superior a la de otras grandes regiones de Europa, el liderazgo en algunos campos, como la biomedicina, y disponer de un sistema financiero de peso, sin politizar, puede favorecer en nuestro país para mirar al futuro con optimismo, siendo importantes a y para|por España.
España tiene unas características especiales que pueden afectar a su reacción. Por un lado cree Castells que la actuación del Gobierno ha estado en general correcto "más vale hacer cosas y equivocarse en algunas que no hacer nada" decía. El desempleo|paro superior al 18% y con tendencia a incrementarse hasta el 20%, y el espectacular déficit comercial del país, hacen que la recuperación se vea todavía lejana.
Propone el Consejero un ajuste pactado de rentas y ser conscientes de que ahora somos más pobres. Históricamente, la devaluación era la solución por|para estos casos, pero ahora el entorno Euro no nos lo permite, por suerte. De manera imprescindible, habrá que llegar a un pacto global, político y social, sin dogmatismos, que ponga todos los elementos en juego: mercado laborado, fiscalidad, ayudas para|por empresarios ... También habrá que buscar soluciones por|para el medio plazo, ya que difícilmente volveremos a crecer utilizando los viejos modelos basados en el ladrillo|tocho. Las infraestructuras, la innovación y la apuesta por|para el talento es la única vía posible por occidente.
De forma épica, nos acaba pidiendo unidad para sacar el país adelante.
¿Haremos caso al sabio?
Más información de la conferencia:
Resumen de La Vanguardia
Es el caso del Conseller Antoni Castells, que hizo el pasado 14 de septiembre de 2009 un resumen de la situación económica y política del país, en una conferencia del Círculo Financiero en la sede de "la Caixa".
Indicaba Castells que si bien desde la vertiente catalana, el curso anterior estuvo marcado por la dura y larga negociación sobre la aplicación del Estatuto en el apartado de financiación autonómica, ahora toca dedicarse plenamente a ayudar al país a superar la crisis lo más pronto posible y con el mínimo desgaste.
La reflexión básica de Castillos es que la economía y la política no pueden ir desatadas, y que la robustez de los dos pilares es imprescindible para generar la riqueza y el crecimiento que el estado del bienestar requiere. El estado y el mercado tienen que ir juntos. Hay que encontrar el equilibrio entre Keynes i Schumpeter, como unas horas más tarde, a menos de 500 metros, nos recordaría Alfons Cornella en su "update" de Infonomia en el auditorio de la Illa.
El Conseller es de la opinión que, aunque lo peor parece haber pasado ya, no se puede dar ninguna oportunidad a una posible recaída y que por lo tanto es razonable mantener la vigilancia desde el optimismo. Comentaba que cree que se aprendió la lección de la depresión de la década de los 30 y que nos evitará entrar en depresión y salir pronto de la recesión. Los errores del pasado fueron una falta de decisión de los estados para crear estímulos y actuar de manera decidida, aunque eso generara endeudamiento, y también una retirada prematura de las medidas anti-crisis. Este convencimiento de que todavía no es el momento de rebajar la vigilancia es lo que lo lleva a manifestarse en contra de un aumento de los impuestos, a pesar de la posición de su partido, aunque es consciente de que no se puede mantener un déficit del 10% durante demasiado tiempo.
Así y todo los brotes verdes se materializan en algunos paises que ya empiezan a tener crecimientos trimestrales positivos en Europa. Indirectamente, Castells cree que la mayor conexión de Cataluña con Europa, superior a la de otras autonomías, puede favorecernos para llegar de nuevo al crecimiento antes. El Estatuto en despliegue, el crecimiento de PIB por capita superior a la de otras grandes regiones de Europa, el liderazgo en algunos campos, como la biomedicina, y disponer de un sistema financiero de peso, sin politizar, puede favorecer en nuestro país para mirar al futuro con optimismo, siendo importantes a y para|por España.
España tiene unas características especiales que pueden afectar a su reacción. Por un lado cree Castells que la actuación del Gobierno ha estado en general correcto "más vale hacer cosas y equivocarse en algunas que no hacer nada" decía. El desempleo|paro superior al 18% y con tendencia a incrementarse hasta el 20%, y el espectacular déficit comercial del país, hacen que la recuperación se vea todavía lejana.
Propone el Consejero un ajuste pactado de rentas y ser conscientes de que ahora somos más pobres. Históricamente, la devaluación era la solución por|para estos casos, pero ahora el entorno Euro no nos lo permite, por suerte. De manera imprescindible, habrá que llegar a un pacto global, político y social, sin dogmatismos, que ponga todos los elementos en juego: mercado laborado, fiscalidad, ayudas para|por empresarios ... También habrá que buscar soluciones por|para el medio plazo, ya que difícilmente volveremos a crecer utilizando los viejos modelos basados en el ladrillo|tocho. Las infraestructuras, la innovación y la apuesta por|para el talento es la única vía posible por occidente.
De forma épica, nos acaba pidiendo unidad para sacar el país adelante.
¿Haremos caso al sabio?
Más información de la conferencia:
Resumen de La Vanguardia